CON EL MUNDIAL EN EL HORIZONTE La historia de dos taxistas y una promesa a la Virgen

¿Serán dos taxistas colombianos los "elegidos " por la Virgen del Carmen para una Misión Divina a Brasil en pleno Mundial de fútbol? “Nos vamos pal Mundial” es la divertidísima historia  de dos amigos, chóferes de taxi,  que prometen a la Virgen del Carmen -Patrona de los conductores- que viajarán hasta Brasil si les hace el milagrito de clasificar la selección colombiana de fútbol al Mundial del 2014.

 Ese día espectacular en que la selección Colombia empata con Chile con un afortunado 3 a 3, se cumple el mayor deseo de estos dos hinchas y comienza la travesía para cumplirle como debe ser, la promesa a la Virgen.

Víctor, un hombre responsable, de familia, lleva el fútbol en la sangre. Siempre quiso llegar a ser futbolista profesional pero lamentablemente nunca se le dieron las cosas.  En consecuencia, vive frustrado y molesto con su único hijo porque no siguió sus pasos, pues este tomó el camino de la milicia, muy lejos del arte del fútbol.

Por su parte, Héctor, fresco por naturaleza, lleva una vida mucho más relajada pero a la sombra de su “mamita” con quien vive a pesar de ya estar mayorcito y de quien heredó toda esa pasión extrema por el fútbol. Doña Lucrecia, su madre, no es cualquier fanática, es “LA” fanática del fútbol más apasionada que pueda existir, llevando todas sus conversaciones cotidianas a nivel futbolístico. Lucrecia suele llevar las riendas de todo: de su vida, de la casa, de la vida de Héctor, incluyendo su vida amorosa, pues le espanta cuanta mujer se le acerca a su consentido y preciado hijo.

Víctor y Héctor, con todos sus obstáculos, tendrán el desafío de buscar el dinero a como dé lugar para poder viajar hasta las tribunas  de los estadios brasileros y gritar a viva voz, “¡Vamos Colombia!”. Lo que no se imaginan son todas las cosas que tendrán que sobrepasar para poder lograr su cometido.

Su despiadado jefe, la falta de dinero, la envidia y la venganza buscarán dejarlos fuera de lugar en sus aspiraciones, sin embargo, la pasión desbordada que siente este par de taxistas por la Selección, su sólida amistad y su gran devoción a la Virgen del Carmen, no apagarán la esperanza de cumplir sus sueños y con plata en mano gritar fuertemente ¡NOS VAMOS PAL MUNDIAL!